Uno de los logros de Thomas Ligotti, uno de sus aportes a la ficción sobrenatural, es su búsqueda de una Estética del Horror. Pocos han sido capaces no solo de captar la oscuridad en su esencia, sino de hacer de este acto de observación, una poética. Como el norteamericano Poe y el chileno Boris Calderón lo hicieran con la amada-muerta; Ligotti lo hace con esa noche que se cierne sobre nosotros a cada instante.
Así, por ejemplo, "Flores del Abismo", es un relato donde Ligotti demuestra esta laboriosidad. De hecho, pienso que la obra ligottiana está constituida por flores abismales, perfumes de un sombrío jardín, al que pocos pueden acercarse y... comprender.
(Dos de los libros de Thomas Ligotti editados por Valdemar, en su colección Gótica)